Doble fábula
Ficción destinada a elevar la moral de los haialim del Tzahal (חיילים של צהל), los soldados de las IDF.
Transcurría la década del 60 (siglo XX) cuando en la escuela Dr. Herzl inventamos una historia.
Por aquellos tiempos habíamos adquirido la innoble costumbre de ufanarnos¹.
En una tensa e imaginaria reunión, en siglo XIX, Wilhelm Marr y Édouard Drumont, titulares de la Liga Antisemita de Alemania y de Francia respectivamente, le inquirieron al Dr. Herzl cuáles eran las mejores personas para un judío (en esa época solo nos protegía la Torah, por lo que el tono de la pregunta era avasallante).
El fundador del sionismo moderno respondió: Para un judío no hay nada más reconfortante que uno que no lo sea... y si fuese antisemita, mejor aún. Sin esperar las preguntas de los "interlocutores", prosiguió: el judío es el elegido.
Poco después, los esbirros diseñaron el exterminio. Lo siguen intentando.
¹ El arte del alardeo fálico sin parecer arrogantes y sin despertar desprecios hacia uno.
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