Convites a un consultante

Se presentó como devoto de su fe, diciendo que acudía al psicoanálisis porque se lo indicaba su ilustre cardiólogo. 

Como se permitió, desde una posición de patrono obsesivo, dirigirme preguntas sobre mis creencias e idoneidad, le detallé:

—Dios siempre me oye... no siempre me complace—.

—Aunque, cuando se permite esa indiferencia hacia mí, se termina sintiendo culpable—.

—Vox populi: él me hizo a su imagen y semejanza. No sé si también sería su caso—.

¿La intervención habrá sido acertada?

En manos del futuro perfecto está la respuesta.

Futuro perfecto o anterior

—¿Por qué el subte está tardando en llegar?—.

—Se habrá producido algún incidente de hora pico o habrá tenido una avería—.

—¡Oh, no! ¿Llegaremos en horario a la reunión?—.

—¡No te preocupes! Hemos salido con tiempo; en unos minutos, el servicio se habrá solucionado—.