LLA

Se rumora que Vanza, arquetípico, bizarro y extravagante varón argentino (porteño), si lograse la exoneración por el delito que jamás cometió, presentaría una ley en la que se prohibiría la licencia de conducir a las personas del sexo femenino. Estas no podrían obtenerla y las ya otorgadas caducarían al instante.

Siempre en el plano de las habladurías, se asegura que sus amigos tratan de disuadirlo; de que no insista más con causas perdidas. Le repiten que, si la sigue, jamás se concretará el anhelado lema: La Libertad a'Vanza. Que desista, de lo contrario la casta lo mantendrá en prisión.

        Fuentes de un verdadero misterio 

Vanza, un apellido común y silvestre, en sus fonemas oculta un complejo esoterismo. 

Ciertos cabalistas lo ligan a Vance, el vicepresidente de USA.

Según magos del Talmud y la Cábala, Vanza o a'Vanza provendría de una de las 12 Tribus Perdidas de Israel. Específicamente de la de Manasés, uno de los hijos de José (hebreo puro) y Asenat (egipcia pura).

Aben (piedra en hebreo) o Ben (hijo) derivó en Van. Del sés (por Manasés) surgió za. 

De este modo llegamos a Vanza o a'Vanza, que, para el anglosajón, más cercano al sufijo sés, sería Vance.